la Procuraduría General de la República incineró más de 210 kilogramos de marihuana correspondiente al caso de las plantaciones de esa droga decomisadas el pasado jueves en la Loma del Cateye, en San José de Ocoa.
El director del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, Francisco Gerdo, quien tiene a su cargo la incineración de toda la droga y sustancias controladas incautadas por las autoridades, aclaró que se procedió a la quema inmediata de la marihuana, que recibieron hoy con un peso de 210 kilogramos, 937 gramos y 494 miligramos, por lo incómodo que resultaba para el laboratorio mantener dicha cantidad almacenada.
De igual forma, explicó que si se almacenaba por varios días se corría el riesgo de que las plantaciones se deterioraran perdiendo peso y características, lo que dificulta obtener la prueba de sustancia que se realiza previo a la quema, como establece la Ley 50-88 sobre drogas y sustancias controladas.
En la incineración, que como de costumbre se realizó en las instalaciones de la Primera Brigada de Infantería del Ejército Nacional, participó la procuradora general adjunta, Carmen Díaz Amézquita, en compañía de representantes de la Dirección Nacional de Control de Drogas y la Policía Nacional.
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