19/03/2024
Cine

Magallanes: el regreso del pasado

Me encontré con Magallanes por casualidad mientras buscaba algo interesante que ver en los canales HBO. Al principio la pasé por alto, y salté al siguiente canal, pero algo en ella –tal vez la quietud y sobriedad de su tono o el rostro adusto y enigmático de su personaje central– me hicieron volver atrás.

Esta coproducción peruana-argentina-colombiana-española representa el debut como director del veterano actor Salvador del Solar (Pantaleón y las visitadoras). Sin embargo, el film refleja tal madurez estilística y es tan sugestivo y convincente que no parece la obra de un principiante.

Del Solar ha compuesto una película que bordea con precisión los terrenos del film noir, al tiempo que profundiza en una de las tantas heridas y secuelas dejadas en Perú en los años 80, como consecuencia de la lucha del gobierno contra el grupo subversivo Sendero Luminoso.

Mientras regresa una tarde de su trabajo ocasional como chofer de su antiguo jefe el ahora retirado coronel Rivero (Federico Luppi), Magallanes (Damián Alcázar), es detenido bruscamente en una calle peruana y en la parte trasera de su taxi aborda una mujer a la que él inicialmente no presta mucha atención.

Conforme se acerca a su destino, no obstante, Magallanes advierte a través del espejo retrovisor que quien está sentada ahí no es una desconocida –aunque ella por su parte, tampoco reconoce la identidad de quien está conduciendo.

En tanto escudriña, una y otra vez el espejo retrovisor, es visible cómo el rostro de Magallanes se ilumina y se contrae como si hubiese sido descubierto haciendo algo indebido. A continuación se hunde en sí mismo como queriendo escapar de los pecados y abusos cometidos por él y el coronel Rivero cuando ambos, como militares activos, andaban por la selva peruana tras las pistas de Sendero Luminoso.

magallanes-salvador-del-solar-1La historia, basada en la novela corta La Pasajera, del escritor Alonso Cueto, y cuyo guión fue escrito por el propio director Del Solar, está narrada en clave de thriller y ofrece de forma simple pero contundente, una mirada a los vejámenes cometidos por el gobierno contra los indígenas en aquellos años.

Es este sentido de culpa lo que lleva a Magallanes a embarcarse en un arriesgado, obsesivo y peligroso viaje de redención. Su relación con Celina (en una excelente actuación de la actriz Magaly Solier) –la pasajera inesperada– y los turbios aspectos que ven quedando al descubierto son la fuerza que mueven y dan consistencia al film.

Tal vez el mayor reproche a la producción tiene que ver con el sentido un tanto gráfico y exagerado del desenlace de la situación del personaje de Christian Meier, pero en definitiva, Magallanes es un film refrescante y cautivamente, y con un nivel de suspenso e intensidad dramática –atención a la descarga verbal de Celina en la jefatura policial– poderoso y sorprendente.

Aun así, tal vez el mayor logro de la película sea el conjunto de formidables y estupendas caracterización que ofrece su elenco. Todo están precisos, empáticos y convincentes. No cabe duda de que Magallanes representa un gran triunfo para su director Salvador del Solar.

Así que si la atrapan por ahí, no dejen pasar la oportunidad de verla. No se arrepentirán.

Comentarios