La Universidad Autónoma de Santo Domingo invistió este jueves como “Profesor Honorario” de la Facultad de Humanidades a Yaqui Núñez del Risco por sus aportes a la comunicación y al periodismo, en un emotivo acto celebrado en el auditorio Manuel del Cabral de la Biblioteca Pedro Mir.
La investidura de Núñez del Risco, primer director de Relaciones Públicas e Internacionales de la academia Primada de América, fue encabezada por el rector, Mateo Aquino Febrillet.
“Me llena de satisfacción y orgullo ser portavoz de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Primada de América, en la feliz ocasión en que celebramos este acto solemne de investidura de Don Pedro Antonio Núñez del Risco, uno de los más relevantes comunicadores sociales de todos los tiempos en la República Dominicana, como Profesor Honorario de esta institución de estudios superiores”, dijo Aquino Febrillet en su discurso.
El rector dijo que para la entrega del reconocimiento a Núñez del Risco, el Consejo Universitario tomó en cuenta los méritos acumulados por el recipiendario a lo largo de una vida consagrada especialmente a la comunicación, en la cual se ha destacado como uno de los hombres mejor dotados de la República.
“Se trata de un ser humano que, además de servidor público y profesor universitario, ha descollado como creador publicitario y comunicador social, digno de la admiración y respeto de sus conciudadanos, a tal punto que ha sido declarado Gloria Nacional de la Comunicación”, agregó.
“Nuestra Alma Máter está resaltando en este ícono de la comunicación social la sencillez de su vida y la amplitud de su cultura, desarrollados desde la perspectiva de su inteligencia privilegiada y sus lecturas y estudios profundos sobre la vida dominicana”, sostuvo.
Susana Silfa, esposa de homenajeado, habló en nombre del homenajeado y de su familia. Agradeció la distinción de la UASD, al tiempo de agregar que lo recibían con mucho beneplácito.
Expresó que ese tributo, sobradamente justificado, se le rinde a un hombre que ha impreso en la sociedad una impronta imborrable con su conducta profesional y comportamiento cívico, vocación de servicio, sentido de la solidaridad y grandeza de espíritu.
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